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La milicia de Misrata dice que ha arrebatado al ISIS su feudo

Los yihadistas ya no controlarían ningún barrio de Sirte, tras más de seis meses de asedio

Francisco Peregil
Miembros de las fuerzas aliadas libias que combaten al Estado Islámico en Sirte, celebran este lunes la toma de los últimos edificios en manos de los yihadistas.
Miembros de las fuerzas aliadas libias que combaten al Estado Islámico en Sirte, celebran este lunes la toma de los últimos edificios en manos de los yihadistas.STRINGER (REUTERS)

El Estado Islámico (ISIS) ya no controla ningún barrio de la ciudad de Sirte, según informó a este diario Rada Issa, portavoz de la coalición de milicias, principalmente de Misrata, que emprendieron en mayo la ofensiva contra el bastión libio de los yihadistas. Estas mismas fuerzas armadas habían proclamado el lunes tener bajo control todo Sirte. Pero a la mañana siguiente reconocieron que aún quedaba resistencia en unos diez edificios del barrio costeros de Yiza Bari. En cualquier caso, la expulsión o casi expulsión de los yihadistas significa que, al menos, están muy lejos de hacerse con el control de las instalaciones petroleras, la casi única fuente de ingresos del país.

Sin embargo, la toma de Sirte no significa que los yihadistas se hayan marchado de Libia. Mantienen células durmientes en Trípoli, fuerzas diseminadas en las afueras de municipios cercanos a la frontera con Túnez y, sobre todo, en el sur desértico del país. Su capacidad de añadir destrucción al caos libio sigue presente.

Hace medio año parecía que la conquista de Sirte sería cuestión de semanas. Al menos, eso era lo que vaticinaban los mandos militares en Misrata. Muchos de ellos fueron los mismos que vencieron a Gadafi en 2011, también con la ayuda de la aviación de Estados Unidos. Sin embargo, los yihadistas sembraron Sirte de coches bomba y apostaron francotiradores en cada edificio.

El ISIS había arrebatado Sirte a las milicias de Misrata en junio de 2015; en pocos meses llegó a controlar 200 kilómetros a lo largo de la costa mediterránea y atrajo a más de 3.000 combatientes, según fuentes de la ONU. La organización yihadista solo ha perdido el control de esta ciudad, donde nació y murió Muamar el Gadafi, después de resistir un asedio de más de seis meses, matar a unos 700 milicianos y herir a unos 3.000. El número de bajas yihadistas permanece desconocido. Los islamistas han sabido resistir seis meses, a pesar de que la aviación estadounidense ha bombardeado desde agosto más de 500 objetivos en Sirte.

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Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

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