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NORUEGA

Haakon y Mette-Marit se recuperan de las quemaduras sufridas durante una entrevista

La princesa, que tiene heridas en la córnea, ha tenido que cancelar un viaje a Alemania

Una extensa entrevista que iba a servir de marco informativo para la visita oficial que el príncipe heredero de la corona de Noruega, Haakon y la princesa Mette-Marit tenían previsto hacer estos días a Alemania, terminó en un nuevo contratiempo para la joven pareja real.

El motivo, la lesiones relativamente graves que Haakon y Mette-Marit recibieron en el rostro, como consecuencia de una exposición de 75 minutos al sol y el calor durante la filmación de la entrevista para la televisión alemana.

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A consecuencia de las mismas, ambos fueron temporalmente hospitalizados y la princesa tuvo que cancelar el viaje. Haakon, con el rostro visiblemente afectado, ha llegado esta tarde solo a Múnich, primera etapa del viaje.

La entrevista, que había despertado mucha espectación en el país anfitrión, fue realizada al aire libre, en los jardines de la propiedad que la Casa Real posee en Skaugum, en las afueras de Oslo.

La combinación de un soleado día de primavera, el reflejo de los rayos ultravioletas en las lentes de los equipos de la televisión, y el calor produjeron las quemaduras en la córnea provocando pequeñas heridas, muy dolorosas especialmente al mover los ojos, según explicó en conferencia de prensa el profesor de oftalmología, Jan Peter Blomhoff.

El color claro de los ojos de Mette-Marit, hizo que resultara más afectada. La entrevista tuvo lugar el pasado miércoles y desde entonces la pareja tiene dolores bastante molestos, dificultad para dormir y ha permanecido en su casa en una semioscuridad. Según el profesor Blomhoff, que los atiende, la agresión solar sufrida es totalmente curable y sin riesgo de secuelas permanentes.

Los comentario giran en torno a la mala suerte de Mette-Marit, que en poco tiempo ha padecido una neumonía, una fractura de pie y ahora esto. Como si no tuviera suficiente con los "hurgadores" de sus pecados de juventud que se empeñan, no se sabe con qué intenciones, en perturbar su felicidad actual

Reuters

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