Nuestra economía padece las consecuencias del marcado sesgo del pasado hacia la inversión inmobiliaria y la menor presencia de los activos ligados al conocimiento, como las TIC, la I+D y otros activos intangibles
Bruselas, teniendo en cuenta los muy distintos grados de dependencia con Pekín, intenta encontrar un equilibrio que sea aceptable para todos sus miembros