El líder espiritual de Irán indulta a Nurí, el 'número dos' de Jatamí
El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, ha perdonado al más destacado disidente del país, el ex vicepresidente Abdolá Nurí, encarcelado desde 1999 por razones políticas, y considerado como un potencial sucesor del presidente Mohamed Jatamí. La medida da un respiro al movimiento reformista en un momento crítico de su lucha por el poder con los conservadores.
Jamenei, que como guía de la revolución controla los principales centros de decisión política a pesar de no ser un cargo electo, decidió el perdón de Nurí el lunes en respuesta a la repentina muerte en un accidente de coche de su hermano, un diputado reformista. Su popularidad quedó clara cuando decenas de miles de personas acudieron a darle el pésame ayer a su casa de Isfahán.
La liberación de este destacado reformista se produce en un momento en que Jatamí intenta moderar la influencia de las instituciones controladas por los conservadores, la mayoría por designación. Para ello, y ante la creciente frustración del electorado, ha presentado dos proyectos de ley para recortar las prerrogativas del Poder Judicial y del Consejo de Guardianes. Destacados reformistas han pedido a Jatamí que dimita si, tal como se espera, dicho Consejo, bloquea las leyes.