El jefe militar israelí vendió sus acciones justo antes de la guerra
Un escándalo económico vino ayer a salpicar la ya deteriorada imagen del jefe del Alto Estado Mayor de la Defensa de Israel, el general Dan Halutz, tras la desastrosa campaña militar realizada en Líbano. El diario Maariv reveló que Halutz vendió todas las acciones que tenía unas horas después de conocerse la captura de dos soldados israelíes por Hezbolá y unas horas antes de que Israel lanzara la ofensiva contra ésta.
El comportamiento de Halutz, que se desprendió de una cartera de valores de 120.000 shekels (unos 22.000 euros) ha sentado especialmente mal entre los mandos militares que han participado en la contienda, que ayer mismo exigían su dimisión.
Fuentes militares citadas por el prestigioso diario Haaretz consideran inadmisible que el jefe de las llamadas Fuerzas Israelíes de Defensa se dedicase a realizar enjuagues económicos cuando estaba en juego la vida de los secuestrados y de los demás soldados enviados a la guerra.
Anoche, el Gobierno seguía sin pronunciarse al respecto pero varios diputados calificaron su conducta de "inapropiada" y pidieron que se abra una investigación. Otros se sumaron a los militares que le exigen la dimisión.
Halutz reconoció los hechos pero los consideró parte de su "vida privada" e indicó que ya había decidido vender antes porque había perdido 25.000 shekels (unos 4.500 euros). La Bolsa se desplomó en los dos primeros días de la guerra en que perdió más de un 8%.
Ayer también, la policía dijo que existían pruebas suficientes como para abrir un proceso al ministro de Justicia, Haim Ramon, de 56 años, por agresión sexual a una joven funcionaria, a la que supuestamente besó en la boca. El ministro, uno de los más influyentes, lo niega.
