Chirac envía a Irak al ministro de Exteriores para lograr la liberación de los periodistas
Los captores exigen la retirada de la ley que prohíbe el velo islámico en las escuelas
El presidente francés, Jacques Chirac, se ha movilizado hoy para lograr la liberación de los dos periodistas franceses retenidos en Irak por un grupo islámico. Por un lado, en una alocución pública, ha pedido "solemnemente" que ambos sean puestos en libertad y por otro, ha anunciado la partida inmediata a Irak del ministro de Exteriores, Michel Barnier, para tratar de conseguir la liberación de los reporteros.
La comparecencia de Chirac se ha producido apenas unas horas después de que su primer ministro, Jean-Pierre Raffarin, reuniera a su gabinete de crisis, con los ministros de Exteriores, Interior y Comunicación para evaluar la situación tras la reivindicación del secuestro de dos periodistas franceses por un grupo terrorista en Irak. Ambos llevaban carios días desaparecidos en el país. El autodenominado Ejército Islámico en Irak, que reivindicó el secuestro del periodista italiano Enzo Baldoni ejecutado la semana pasada, ha reivindicado el secuestro de Christian Chesnot, colaborador de las emisoras RFI y Radio France, y de Georges Malbrunot, del diario Le Figaro, y por su liberación exigen a Francia la revocación de la ley que prohíbe en las escuelas el uso de símbolos religiosos, entre ellos el velo islámico. Francia no tiene tropas en Irak.
Tras la reunión del gabinete de crisis, Chirac ha anunciado que el ministro Michel Barnier, sale "inmediatamente" para Irak con el fin de desarrollar "los contactos necesarios y coordinar allí los esfuerzos" franceses para tratar de obtener la liberación de Chesnot y Malbrunot. Según ha dicho el presidente, "se hace y se hará todo en las horas y los días venideros" para obtener la liberación de los dos periodistas.
En una declaración radio-televisada después de reunirse con el primer ministro Raffarin, Chirac ha dicho que "Francia es la patria de los derechos humanos", es "una tierra de tolerancia" que asegura "la igualdad, el respeto, la protección del libre ejercicio de todas las religiones en el marco de nuestra ley común. Esta tradición, anclada en nuestra historia, es el cimiento de nuestra cohesión nacional". Según sus palabras, "estos valores de respeto y de tolerancia inspiran nuestra acción en el mundo entero", incluida "nuestra política sobre Irak". Francia abanderó el año pasado la oposición a la intervención de EE UU en Irak.
En su breve intervención, con aire grave, el presidente ha expresado la "solidaridad y determinación" de Francia a los dos periodistas y sus allegados, pero no ha mencionado la exigencia del Ejército Islámico de Irak, limitándose a hablar del "ultimátum" enviado por los secuestradores a Francia.
