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HÉCTOR ARCE | PRESIDENTE DEL CONGRESO DE BOLIVIA

“En Bolivia hay una pugna por el poder entre dirigentes indígenas”

El alto cargo boliviano, muy cercano a Evo Morales, considera que la elección popular de jueces acabará siendo imitada por otros países

Héctor Arce, presidente del Congreso de Bolivia.
Héctor Arce, presidente del Congreso de Bolivia.BERNARDO PÉREZ

El presidente de la Cámara de Diputados de la Asamblea Plurinacional de Bolivia, Héctor Enrique Arce Zaconeta, era conocido hace una década como el abogado de Evo Morales, el líder indígena que acabó alcanzando la presidencia del país en 2005 y revalidó el cargo en 2009. Este año, Morales se ha enfrentado a las mismas bases indígenas que lo auparon a la presidencia, que se han manifestado en el centro de La Paz contra él por intentar hacer una carretera que atravesaba una reserva natural. Las imágenes de la policía boliviana disolviendo a palos a los indígenas dieron la vuelta al mundo. Arce, invitado por la Cátedra de Estado Constitucional y Justicia en América Latina de la Universidad de Valencia, dio el jueves una charla en la Casa América de Madrid sobre la experiencia de una inédita elección popular de jueces en las urnas que se saldó el pasado 16 de octubre con más de un 60% de votos nulos, lo que la oposición interpretó como un rechazo plebiscitario al presidente.

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Pregunta. ¿Cuál es la explicación detrás de las manifestaciones indígenas contra el presidente Evo Morales?

Respuesta. Hay que diferenciar lo que son los pueblos indígenas de los dirigentes indígenas. Hay un sector de los dirigentes indígenas que tienen, en mi criterio, aspiraciones políticas y esas aspiraciones les llevan a hacer movilizaciones en nombre y representación de los pueblos indígenas sin que esos pueblos tomen una verdadera conciencia de lo que sus dirigentes plantean. En el fondo hay una pugna por el poder. Hay muchos dirigentes indígenas que dicen 'nosotros podemos ser los próximos líderes' y erróneamente pretenden enfrentarse a Evo Morales como Evo se enfrentaba con la derecha, entendiendo que en esa lógica se van a hacer líderes como se hizo Evo Morales. Y no se dan cuenta de que se están equivocando porque no se están enfrentando a los sectores conservadores y a los políticos tradicionales, sino a un líder natural, consolidado y reconocido mundialmente como Evo Morales.

P. ¿Pero no hay sitio para otros líderes en la comunidad indígena?

R. Claro que lo hay, pero hay que ganarlo con trabajo y con actitudes nobles. Nuestra Constitución no limita el surgimiento de otros liderazgos, pero con fines, mecanismos y armas nobles, correctas.

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Los líderes indígenas no se dan cuenta de que se están equivocando porque se están enfrentando a un líder natural"

P. Pero cuando llega un grupo de indígenas y se instala en el centro de La Paz y protesta contra el presidente la percepción que se tiene es que el presidente ha perdido el apoyo de sus bases.

R. Eso es una percepción, no corresponde a la realidad. Por varios elementos. Era un grupo de dirigentes que en principio se han opuesto concretamente a una carretea, no es un tema político. Se han opuesto a que hagamos una consulta a todos los habitantes del territorio del parque nacional, a las personas que viven allí. Si más del 50% no lo quería, no se hacía. Esa es la manera correcta y democrática de resolver los temas. Eso es lo que planteamos y a eso se opusieron temiendo un resultado adverso, que hubiera cuestionado a esos dirigentes.

P. ¿Por qué es tan importante esa carretera?

R. Porque en un país como el mío las carreteas son progreso, integración y desarrollo. La ciudad de Santa Cruz, antes de 1952, eran unas cuantas manzanas con calles polvorientas. Hoy es una ciudad pujante y poderosa, el orgullo de Bolivia, gracias a la construcción de una carretea por los Gobiernos de la revolución nacional. Eso marca. Esta carreta podría generar un gran desarrollo en el norte, en amazonia. Es una vía de integración que se lleva estudiando desde antes incluso de la actual República. En un país como el nuestro, oponerse de manera tan tajante a la construcción de una carretera es un error histórico.

P. Pero una vez vita la oposición que despierta, ¿por qué el empeño en construirla, por qué precisamente por ahí? ¿No había una manera de evitar el enfrentamiento?

R. No hay un empeño ni una búsqueda de enfrentamiento. En esa movilización pidieron un cambio de trazado y Evo Morales, con su lógica de mandar obedeciendo al pueblo, sugirió a la asamblea nacional una modificación en base a esas peticiones. El parque no se toca y no pasa ninguna carretera. Pero una carretera entre Cochabamba y Trinidad no tiene otro trazo posible. Es una razón técnica. Pero no hay ningún encono ni encaprichamiento, está paralizado.

En un país como el nuestro, oponerse de manera tan tajante a la construcción de una carretera es un error histórico"

P. En cuanto a las elecciones de jueces, ustedes dicen que es una innovación, pero también es una anomalía, ¿cómo se defiende?

R. Es una elección inédita. Somos el primer país en el mundo que implanta una forma de elección de las máximas autoridades judiciales. Es un experimento en estado natural, se prueba por primera vez en el mundo. Y con el resultado podemos decir que ha sido positivo. Se han elegido jueces con gran respaldo popular, gran cantidad de votos. La comprobación definitiva de que el sistema funciona o no está ahora en sus manos. El trabajo que se ha hecho ha sido para darles independencia, para que puedan ser autoridades transparentes y que respondan para construir una mejor justicia. Pero eso depende de ellos, el pueblo boliviano ha cumplido con su voto y su participación y los próximos seis años veremos cuál es el comportamiento de esas autoridades y si la fórmula puede repetirse en otros países. Hay mucho interés académico sobre ello.

P. ¿El enorme porcentaje de votos blancos y nulos no deslegitima el proceso?

R. Lo que ha habido ha sido una campaña de algunos partidos de oposición que no se han dado cuenta de que esta no era una elección política, no era una campaña en la que participara Evo Morales. No mediaron los partidos, no se podía hacer campaña. Era una elección que tenía un fin, que es buscar autoridades judiciales independientes, que es lo que le interesa a cualquier Estado de derecho. Y algunos actores políticos que en Bolivia son muy enconados y buscan siempre la forma de entorpecer el desarrollo pretendieron convertir esto en un plebiscito contra Morales.

Somos el primer país en el mundo que implanta una forma de elección de las máximas autoridades judiciales"

P. Y con cierto éxito, parece.

R. No. Fracasaron. Por ejemplo, un partido pidió que se pusiera el No en la papeleta, no hubo datos de que eso se produjera. Algún éxito tuvieron, principalmente en áreas urbanas. Hubo gente que se dejó sorprender y perdió su derecho a elegir autoridades judiciales de su conveniencia. Hubo mucho error, porque era la primera elección de este tipo en Bolivia y en el mundo. Eran listas muy largas, de 28 personas para cada tribunal. Hubo mucho desconocimiento porque como no se hacía campaña mucha gente no sabía que hacer con la papeleta, hasta autoridades del Gobierno y nosotros mismos nos encontramos con una papeleta de más de 100 personas y había que elegir y era difícil. Pero hubo una participación importante. Hay autoridades electas que tienen 500.000 votos, el doble de lo que tiene el alcalde de la sede de Gobierno, o seis veces más que el diputado más votado. Con un 80% de participación, el fracaso fue de quienes pretendieron convertirse en un plebiscito. ¿Ahora qué dicen? Las autoridades han recibido sus credenciales y ya están trabajando con un mandato claro de la sociedad.

P. ¿Pero el mensaje es claro con más del 50% de votos no válidos?

R. No. De verdad. Hubo mucha gente que anuló su voto sin querer y gente que no conocía. De los votos nulos, hay una parte me imagino que fue de rechazo, muy poca gente puso “no”, pero mucha gente se equivocó porque no hubo suficiente campaña. Es la primera vez en el mundo que se hace.

P. ¿Y no cree que hay una razón por la que esto no se ha hecho en ningún sitio?

R. El derecho es una ciencia. Y la ciencia va descubriendo nuevas cosas. La ciencia médica investiga una cura para el sida. La ciencia aeroespacial intenta poner un hombre en Marte y no lo logra. La ciencia del derecho también busca respuestas. Hay una pregunta que se hacen aquí en España y en todas partes: ¿Cómo logramos tribunales que sean independientes, que no tengan condicionamiento político? En España hay polémica porque se demora en elegir autoridades judiciales porque los partidos no se ponen de acuerdo y eso molesta a la ciudadanía. La fórmula constitucional boliviana pretende dar una solución. Pero como la ciencia también se comprueba después de la implementación, hay que esperar a que pasen estos seis años y ver el resultado.

P. ¿Entonces hay una posibilidad de marcha atrás?

R. No. Es absolutamente prematuro pensar en eso. Lo que va a pasar más bien es que otros países lo van a ver y lo van a estudiar. Hay mucho interés académico sobre la formula boliviana. Todo depende en última instancia de las autoridades electas y que se sometan solamente a la ley y no a presiones políticas. Magistrados que honren el vínculo con el pueblo. Si son autoridades cabales que contribuyan a una mejor justicia, la formula se instalara en otros países.

Para que haya acuerdos tiene que haber quien quiera acordar, y la oposición política no quiere eso"

P. La oposición denunció que hubo dificultades para presentar a algunos juristas independientes o no afines al Gobierno.

R. No hubo ningún juez afín al Gobierno. Yo trabajé con Evo Morales como abogado. En el MAS [Movimiento Al Socialismo] nunca hubo cedulas de bogados como en otros partidos. El MAS lleva seis años en el Gobierno y el partido necesita abogados. Hoy día, como presidente de la Cámara de Diputados recibo llamadas de ministros que me dicen ‘Héctor, ¿tienes tú para recomendarme algún abogado administrativista o de este otro tipo?’. Si estas 120 personas elegidas hubieran sido del MAS habrían tenido que trabajar en alguna institución, si el MAS lleva seis años en el poder. A quienes han sido constituyentes exparlamentarios se les ha excluido, a la madre de la secretaria del presidente se la ha excluido por decisión del presidente. Es una falsedad. Lo que pasa es que la voluntad popular, en 2009 le dio al MAS dos tercios y las designaciones pasan por esos dos tercios. No podemos sentirnos mal ni acomplejarnos por un resultado histórico en las urnas.

P. Pero aunque uno tenga la mayoría parlamentaria para hacer esos nombramientos, ¿no son los grandes acuerdos los que garantizan la continuidad de las instituciones?

R. Los acuerdos y las componendas políticas es lo que la sociedad rechaza. Para que haya acuerdos tiene que haber quien quiera acordar, y la oposición política no quiere eso. Nosotros hicimos un proceso de selección durante dos meses, y la oposición, cuando estaba todo acordado, pateó el tablero y decidió que no quería pactar nada sobre la elección, porque le convenía más salir y decir mentiras como que ‘se están eligiendo entre ellos’. No les conviene decir que llegaron a un acuerdo. Ellos no construyen país, la oposición en Bolivia destruye.

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Sobre la firma

Pablo Ximénez de Sandoval
Es editorialista de la sección de Opinión. Trabaja en EL PAÍS desde el año 2000 y ha desarrollado su carrera en Nacional e Internacional. En 2014, inauguró la corresponsalía en Los Ángeles, California, que ocupó hasta diciembre de 2020. Es de Madrid y es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense.

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