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Obama ofrece ayuda forense a México por el caso de Ayotzinapa

El presidente de EE UU destaca el problema “crónico” que supone que narcotraficantes se apoderen de regiones mexicanas enteras

Reunón de los padres de los desaparecidos con los legisladoresFoto: reuters_live | Vídeo: Reuters-Live
Juan Diego Quesada

El presidente de Estados Unidos afirmó este martes que ha ofrecido a México su colaboración para investigar la desaparición y probable asesinato de 43 estudiantes de magisterio en el estado de Guerrero, al sur de México y una de las regiones más pobres del país. Barack Obama ha puesto a disposición de su homólogo, Enrique Peña Nieto, la experiencia en temas forenses de su país para tratar de resolver un caso que ha puesto de manifiesto la infiltración del narcotráfico en la política y de paso la incapacidad resolutiva de la estructura judicial mexicana.

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“Esto será investigado [el caso Iguala]. Hemos ofrecido asistencia para dar exactamente con lo que pasó, nuestras capacidades forenses, para llegar al fondo”, manifestó Obama en una entrevista concedida a la cadena latina Telemundo. No es la primera vez que el vecino al norte del río Bravo se refiere a la desaparición de los estudiantes en México. El portavoz de la Casa Blanca, John Earnest, había considerado el pasado 28 de octubre que los reportes sobre el caso que provocó la desaparición de los 43 jóvenes y la muerte de seis personas en Iguala eran "preocupantes".

La portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, declaró el 13 de noviembre que el Gobierno estadounidense estaba siguiendo de cerca los acontecimientos y que entendía, con un cierto tono de duda, que las autoridades mexicanas habían comenzado una investigación. 

Lo último que se sabe es que uno de los 43 alumnos fue identificado por uno de los huesos hallados en unas bolsas de basura que la policía encontró flotando en un río. El muchacho se llamaba Alexander Mora Venancio y rondaba los veinte años. En esos plásticos se hallaron otros 16 restos óseos, en peores condiciones, que han sido enviados a un laboratorio especializado en Austria para que sean analizados. Las esperanzas son más bien pocas. En un comunicado de hace un par de días, la Universidad Médica de Innsbruck reconoció que los restos enviados están muy deteriorados y las probabilidades de obtener resultados concluyentes son escasas.

Lo mejor que podemos hacer es ser un buen socio y construir sobre el progreso que se ha hecho
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Los estudiantes pertenecían a una escuela, la de Ayotzinapa, que forma maestros que enseñan en las comunidades rurales. Uno de los requisitos para ingresar en el centro es demostrar pobreza. El día que desaparecieron, el 26 de septiembre, se enfrentaron con la policía de Iguala, una ciudad a una hora y media de la escuela a la que habían viajado para apropiarse de unos autobuses que utilizarían para sus desplazamientos. Una práctica común entre el alumnado. La teoría de las autoridades mexicanas es que los agentes detuvieron a 43 de ellos y los entregaron a sicarios de un cartel, molestos por la intromisión en su territorio de unos alborotadores. O por motivos que todavía no han sido aclarados. El caso es que los pistoleros los asesinaron y quemaron en una gran pira encendida en el apartado basurero de Cocula, una población vecina. Los matones, jovenzuelos captados por el crimen, han declaro que dejaron el fuego encendido unas 12 horas. Después regresaron, recogieron los restos carbonizados en las bolsas y las lanzaron al río San Juan. Los forenses argentinos, peritos extranjeros contratados por su solvencia profesional, han declarado que no existe evidencia física alguna que demuestre que los restos hallados en el río fueron incinerados en el basurero.

La ayuda de Estados Unidos, según lo declarado por Obama, estaría encaminada a aclarar los interrogantes abiertos en un caso por el que han sido ya detenidas 80 personas. “Es un problema crónico de narcotraficantes, que en algunos casos toman el control de pueblos y regiones enteras […] Porque esto sí nos afecta. México es nuestro amigo y vecino. Queremos que prospere”, incidió el presidente de EE UU, que se ha ofrecido como un socio importante y destacado para que México mejore el sistema de justicia criminal y las capacidades investigabas de sus autoridades.

Los errores del Gobierno en la resolución del crimen de los estudiantes y el descubrimiento de que la mujer del presidente compró a plazos una casa de varios millones de dólares a una constructora beneficiada con adjudicaciones públicas ha conmocionado a México. El país pasa por una gran zozobra institucional. Obama no entró a valorar a detalle la crisis mexicana: “Creo que lo mejor que podemos hacer es ser un buen socio y construir sobre el progreso que se ha hecho”.

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Sobre la firma

Juan Diego Quesada
Es el corresponsal de Colombia, Venezuela y la región andina. Fue miembro fundador de EL PAÍS América en 2013, en la sede de México. Después pasó por la sección de Internacional, donde fue enviado especial a Irak, Filipinas y los Balcanes. Más tarde escribió reportajes en Madrid, ciudad desde la que cubrió la pandemia de covid-19.

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