Roma nombra obispo de Huesca y Jaca a un monje franciscano
El Vaticano anunció ayer, por medio de la Conferencia Episcopal Española (CEE), que Juan Pablo II ha nombrado obispo de Huesca y Jaca, uniendo ambas diócesis, a Jesús Sanz Montes, un fraile franciscano que hasta ahora dirigía el secretariado de la CEE para la Vida Consagrada. La diócesis de Huesca estaba vacante desde agosto de 2001, tras la renuncia por razones de edad y salud de Javier Osés Flamarique, que falleció dos meses después, y la de Jaca carecía de prelado titular desde octubre de 2001, por fallecimiento de José María Conget Arizaleta. Desde entonces ha actuado como Administrador Apostólico de ambas sedes el obispo de Barbastro-Monzón, Juan José Omella Omella.
Jesús Sanz Montes, natural de Madrid, tiene 48 años y es fraile franciscano desde 1985. Doctor en Teología, ha sido rector del Seminario Franciscano de Ávila y es profesor de la Facultad de Teología San Dámaso de Madrid. También dirige la revista Verdad y Vida.
Compleja reunión
Sanz Montes aseguró ayer, en conferencia de prensa convocada por la CEE, que aunque las dos diócesis se unen bajo su mandato con la fórmula canónica in persona episcopi (en la persona del obispo), tanto Jaca como Huesca mantendrán su autonomía. Huesca pertenece a la archidiócesis de Zaragoza, y Jaca, a la de Pamplona. El nuevo prelado cree que sería natural que ambas se integraran en la misma región eclesiástica de Zaragoza. De momento, piensa residir permanentemente en Huesca, con estancias temporales en Jaca. Huesca fue erigida como diócesis en el siglo VI, y Jaca, en el XI,
Sanz Montes será, cuando tome posesión, el sexto obispo español perteneciente a un instituto de la vida consagrada. Como él, son franciscanos el cardenal Carlos Amigo Vallejo, arzobispo de Sevilla desde 1982, y José Gómez González, obispo de Lugo desde 1980. A los misioneros claretianos pertenecen Fernando Sebastián Aguilar, arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela, y Luis Gutiérrez Martín, obispo de Segovia. El sexto fraile del episcopado es el prelado de Vitoria, Miguel José Asurmendi Aramendía, salesiano.
